Tarde de paseo en el Parque de Vigeland
Oslo es una ciudad cara. A nadie le voy a sorprender con esta afirmación. Pero eso no significa que no podamos pasar un rato agradable sin dejarnos el bolsillo.
Cuando visitas Oslo recorres la zona centro, con su famoso Ayuntamiento y a lo mejor te coges un barco para visitar los museos de Kon-tiki, de los barcos vikingos o el de Fram.
Entre eso y la comida te acabas dejando el presupuesto en un abrir y cerrar de ojos.
Bueno, pues seguramente dentro de los puntos de tu guía aparece un parque, fácil de encontrar, bastante céntrico y que te va a hacer disfrutar de una tarde (o una mañana) sin gastarte un eurito.